No es excepcional que esta especie se encuentre en el entorno del Mar de Alborán, aunque sí es poco común

D. G. / Granada | 9 de diciembre de 2022
“Hoy se ha visto a una familia de Orcas en las aguas de Calahonda. Un gran macho con una hembra también adulta y la cría de ambos en su adolescencia. Increíble”. Es el mensajea de Pablo H. Inchausti, que ha conseguido unas impactantes imágenes de estas ballenas en aguas de la Costa granadina, entre Calahonda y Castell de Ferro.
No es excepcional que esta especie se encuentre en el entorno del Mar de Alborán, aunque sí es poco común que se avisten cerca de la Costa de Granada. De hecho, la mayoría de avistamientos se dan en la Costa de Cádiz, donde se acercan por los bancos de atunes, un tipo de pesca que está en aumento en la Costa granadina.

Conocidas como ballenas asesinas
La orca (Orcinus orca) es una especie de cetáceo odontoceto perteneciente la familia Delphinidae (delfines oceánicos), que habita en todos los océanos del planeta. Es la especie más grande de delfínido y la única existente actual reconocida dentro del género Orcinus. se puede localizar en España, en el mar Cantábrico
Este cetáceo posee una complexión robusta e hidrodinámica. La especie, como característica distintiva, posee una aleta dorsal muy larga que llega a medir hasta 1,8 metros en los machos y presenta una coloración blanca y negra que se distribuye de manera particular, la cual es propia de cada individuo y permite distinguirlo de los demás. La orca tiene un dimorfismo sexual marcado; las hembras son más pequeñas que los machos y tienen la aleta dorsal más corta. Mientras que una hembra suele pesar menos de 4 t y rondar los 6 m de largo, un macho adulto puede alcanzar un peso de 5,5 t y medir hasta 8 m de longitud.
Los individuos de la especie forman estructuras sociales complejas y se organizan en grupos matrilineales (descendencia definida por la línea materna); para facilitar la socialización utilizan un método de comunicación sofisticado. Como superdepredador en la cúspide de la cadena trófica, sin ningún enemigo o depredador natural, la orca es capaz, incluso, de alimentarse de especies tan grandes y tan bien preparadas para el ataque como ellas mismas.
Así, no sólo compiten con otros animales en la caza de focas, delfines, grandes calamares o peces, sino que, además, se han constatado casos de orcas atacando a tiburones blancos en aguas del océano Pacífico en el área de California, frente a las costas de San Francisco, donde se han registrado y grabado especímenes de orcas devorando grandes tiburones blancos, sobre todo en la época del año en la que son más frecuentes los avistamientos de estos últimos cerca de la costa.
Desde la antigüedad, en la cultura occidental se lo consideró un animal feroz y peligroso. Esa imagen empezó a cambiar desde la década de 1960, al observarse que los primeros animales en cautiverio se comportaban dócilmente y no intentaban agredir a los humanos. Se han registrado muy pocos ataques a humanos por parte de individuos en libertad