Dos agentes de la Policía Nacional ha resultado heridos en la actuación
M. Zugasti / Granada | 11 de marzo de 2022
Hace apenas unos días los vecinos del número 21 de la calle Molinos, en el barrio del Realejo, denunciaban en sus redes sociales las interminables fiestas en esta vivienda okupada. Tras un primer intento de desalojo el pasado 27 de enero, la Policía Nacional ha vuelto esta mañana al inmueble y ha procedido al desalojo de las 22 personas que se encontraba allí alojadas. Dos de los okupas han sido detenidos y dos agentes han sido heridos de carácter leve en la refriega que ha provocado la desocupación de la casa.
La Policía Local ha tenido que cortar el tráfico de la calle Molinos durante la actuación, debido a la fuerte resistencia de los okupas.
El pasado 27 de enero la Policía Local se presentó en la vivienda para identificar a los ocupantes del inmueble, cumpliendo así con las órdenes del juzgado.
Los okupas de esta casa vivían hasta el pasado mes de noviembre en otro inmueble en las inmediaciones, hasta que fueron desalojados y decidieron no mudarse de barrio e irse a vivir a otro inmueble cercano, con la circunstancia de que en el proceso de desalojo se arrestó a uno de los okupas por la supuesta comisión de dos intentos de homicidio en el céntrico Campo del Príncipe.
Los vecinos, que llevaban meses sufriendo los actos incívicos de los okupas, vieron como estos no se movían de la misma manzana, lo que estaba provocando notables problemas de convivencia, según aseguran los vecinos.
Y para enmarañar más el asunto, una concentración de Stop Desahucios 15M Granada en Plaza Nueva, al conocer la actuación de la Policía Nacional, se trasladó a la casa okupada para protestar por la acción policial, viviéndose momentos de tensión hasta que los agentes abandonaron el lugar. Fue una victoria efímera. Hoy ya han sido desalojados y el propietario ha tapiado el inmueble.
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